La tapas típicas de Sevilla, una forma de comer en vacaciones

Cuando salimos de escapada fin de semana a un lugar determinado, uno de los puntos a tener muy en cuenta es el de los gastos que vamos a tener en comida durante nuestro viaje. De vez en cuando, llegamos a lugares donde no existe más de una opción, y es la de comer en algún restaurante de la zona. Este condicionamiento suele mermar bastante en algunos casos el presupuesto inicial que hemos previsto para este apartado tan importante en cualquier viaje. Sin embargo, hay otras opciones tan apetitosas y más asequibles para nuestro bolsillo. Se trata de la «tapa», tan extendida, sobre todo, por todo el sur de España.
Por ello, si realizamos una escapada barata a Sevilla, una buena forma de reducir gastos y de probar mucha variedad gastronómica de la tierra, es la de salir de «tapas». Porque esta forma rápida de comer y de degustar muchos pequeños y variados platos, acompañados de una cerveza o de un vino de la tierra, es bastante tradicional, no solo en Sevilla, sino en toda Andalucía. Y en Sevilla hay tapas para todos los gustos y paladares, y de ello os voy a hablar un poco a continuación.
Una tapa muy típica de Sevilla es el «caballito de Triana», que consiste en un trozo de pan caliente al que se le coloca encima una loncha de jamón. También son muy demandadas las exquisitas «puntas de solomillo», buenísimas. Otra tapa muy común, sobre todo en el Barrio de Triana, es la de «chipirón a la plancha».
Uno de los barrios de Sevilla donde encontraremos más variedad de tapas es en el Barrio Santa Cruz. Por ejemplo, allí se encuentra Casa Carmelo, lugar obligado en la ruta del tapeo, instalado en una casa típica sevillana y que cuenta con veladores fuera del local, para disfrutar del buen ambiente de la calle Gloria y de unas tapas exquisitas: el adobito sevillano, la fritura de pescado, la caldereta, las puntillitas fritas, la paella de espumadera, las tortillitas de camarones y las croquetas de cola de toro, entre otras muchas. Porque la variedad es bastante grande y los precios suelen ser en general baratos para las proporciones de las tapas.
Las tapas son, sin duda, una buena manera de conocer en poco tiempo la buena gastronomía sevillana y, en general, de toda Andalucía, y una buena forma de alimentarnos bien y sin gastarnos demasiado en nuestra escapada barata a Sevilla.

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