Todo cambio que apunte hacia la modernidad es bienvenido. Sin embargo si esto conlleva a un aumento en el costo de los servicio que recibimos genera un paso atrás y contraproducente con el cambio. En Alicante, AENA Aeropuertos está imponiendo el uso de las pasarelas telescópicas a empresas como Ryanair para el abordo de pasajeros al avión respectivo y viceversa lo que pondría en peligro las tarifas bajas que se ofertan para salir o llegar a este terminal aéreo.
Necesidad o lujo
Las pasarelas telescópicas permiten rápidamente dar acceso a los pasajeros desde la zona de embarque al avión. Muchas veces se aplica solo en vuelos internacionales, otras no. Por otro lado el abordo clásico al avión que se realiza por medio de la escalera brinda algo que no sucede con las pasarelas telescópicas, el contacto exterior con el avión, la cual desencadena una serie de sensaciones indescriptibles a favor del viajero. Para muchos lo importante es subir al avión y punto, sin importar si esto sucede con escalera, con pasarela u otro medio existente siempre y cuando no conlleve a un incremento de la tarifa de vuelo. Entonces, en esos casos se considera no solo la instalación de estas pasarelas sino su uso como un lujo innecesario.
Lo que perdería Alicante
Para comenzar, el imponer a las aerolíneas el utilizar estas pasarelas telescópicas significa un incremento directo a las tarifas lo que conllevaría una menor frecuencia de vuelos y como consecuencia el retiro de rutas aéreas que tengan que ver con el aeropuerto de Alicante. Esto a su vez pone en riesgo la situación turística actual y los puestos de trabajo que dependen de este sector. Haciendo una secuencia lógica simple seria como sigue: menos rutas aéreas a alicante significa, menos pasajeros al año, menos ingresos por turismo y menos puestos de trabajo en el sector.
Como su opinión cuenta, usted puede realizar una encuesta relacionada con esta imposición hacia Ryanair en su página web como una esperanza para salvar las tarifas bajas en Alicante.
