No sólamente será una escapada romántica, sino mucho más. La ciudad que no duerme nunca encandila al más incrédulo, sus rascacielos y su modernidad te atrapan y no querrás volver a casa.
Manhattan es una de las islas más pobladas del mundo. New York city tiene la culpa, pues es una de las ciudad más cosmopolitas y completas del mundo. Hay mil cosas que visitar porque su movimiento es continuo. Daremos un repaso general a esta maravilla para desglosar, en próximos artículos, su vida bohemia, sus tiendas, sus museos y los lugares más emblemáticos que visitar.
Las luces de Times Square vislumbran una ciudad con vida. Es el centro neurálgico del que puedes dar vuletas y vueltas y no te cansarás. De vez en cuando recomendamos comer un hot dog para recargar fuerzas, la mayoría por menos de un dólar.
En su recorrido por la Gran Manzana nos detenemos en Broadway, el barrio de los teatros. Un sinfín de centros donde se realizan importantes musicales, normalmente protagonizados por actores destacados, nos esperan. No te lo pierdas. Recomendamos comprar las entradas antes de ir a la ciudad, cómodamente por Internet, porque el éxito es tal que puedes quedarte sin localidades.
Estar en Nueva York y no subir al Empire State tiene delito. Desde él se observa una vista nunca antes comtemplada de la ciudad. Rerserva tu entrada antes y no sufriras tantas colas, puedes ver la ciudad de día y quedarte hasta el atardecer porque de noche impresiona.
En Lover Manhattan o centro hay muchas tiendas de moda. Algunas espectaculares y prohibidas (por sus precios), pero otras son más económicas y casi siempre hay productos con descuentos. Atención a los mercadillos ambulantes por la calle, son la mejor opción para conseguir marcas tiradas de precio.
Si quieres visitar los diversos barrios, aconsejamos Brooklyn (lo mejor es atravesar su puente a pie). Te encantarán sus casitas y las tiendas vintage. Harlem, por otra parte, nos descubre un barrio de contrastes. No te pierdas las sesiones gospel en alguna de sus iglesias.
Es hora de coger el ferry (que es gratuito) y llegar hasta Stated Island. Nos hará un recorrido de ida y vuelta desde el que veremos la estatua de la libertad (no es tan grande como nos la pintan) y te permitirá descansar un rato.
Si tienes oportunidad, llega hasta la playa, es otra forma de ver la ciudad y pasear por lugares no tan típicos. La ciudad y sus oportunidades nos esperan. Próxima parada a sus museos, muy pronto.
