Eslovaquia, la nación de Europa Central puede no estar en el tope de la de la lista de destinos de vacaciones preferidos, pero no por la falta de encantos. Con su terreno montañoso, puede ser ideal para el esquí, senderismo, montañismo y snowboard. En particular, los Altos Tatras, en Eslovaquia, forman una zona de la cordillera de los Cárpatos, ofrecen maravillosas oportunidades para estas actividades. Telesillas y telecabinas en los valles alpinos, ayuda a que se convierta en un lugar de moda para los viajero.
Además de sus refugios de montaña impresionantes, Eslovaquia también tiene numerosos castillos medievales con objetos expuestos, iglesias de madera y casas antiguas registradas como patrimonio atesoradas en páginas web. Se jacta también de un buen número de parques, zoológicos, museos, retiros de spa, teatros populares y antiguos cafés de pueblo. Los turistas están descubriendo poco a poco estos lugares, y muchos están contentos de saber que la exploración de Eslovaquia ya no es tan cara como viajar a otros destinos en Europa. Así, los visitantes aparecen en Eslovaquia cada año, con un promedio de medio millón al último año.
El fondo de la República de Eslovaquia es la pintoresca ciudad de Bratislava. Esta hermosa ciudad tiene una rica cultura, sin embargo no está contaminada por el mercantilismo. Aquí, puede caminar sin ser empujado por una multitud ruidosa de turistas.
Hay unos 50 museos en Eslovaquia, el más conocido de ello es el Museo Nacional Eslovaco en Bratislava. Sus exposiciones sobre la historia de Eslovaquia y la arqueología ciertamente fascinan a los visitantes, que luego descubren, entre otras cosas, las artes populares y la artesanía del país. Los artesanos eslovacos sobresalen en la pintura de vidrio, talla de madera y el tejido de tela, que a lo largo de varios siglos han sido populares entre las actividades rurales. La arquitectura es otro de los logros culturales, como se evidencia en las iglesias de madera de Eslovaquia y vívidas casas de colores que salpican el paisaje.
Además de los museos, En Eslovaquia hay teatros que promueven la música tradicional y convencional de las artes operísticas. La música folclórica se ha prolongado siendo una parte importante de la tradición eslovaca, es considerada realmente una de las primeras y más originales de todos los eslavos y de las tradiciones populares europeas, con sus raíces hacia el siglo IX.
