Cuando nos referimos a escapadas para amantes no lo hacemos pensando en amantes del vino, del chocolate, de la ornitología o del ciclismo, sino a amantes reales, de los de siempre, aquellos que de manera furtiva o tras mil estrategias conseguían esquivar a sus parejas y escaparse a un lugar perdido donde nadie pudiera encontrarlos. Pienso que también ese comportamiento debe merecernos respeto por aquello de que nadie sabe lo que se cuece tras cada pareja y las circunstancias que obligan a muchos y a muchas, por supuesto, a tomar decisiones de ese tipo. Por ello, las escapadas para amantes, aunque resulte un tema tabú por aquello de la corrección, están también a la orden del día como cualquier otro tipo de conexión amorosa.
Tengamos en cuenta un importante detalle y es que este tipo de escapadas, aunque podrían ser consideradas románticas como las tradicionales, a veces exigen situaciones y detalles algo más especiales y exquisitos. No consiste en desmerecer en absoluto las clásica escapadas románticas de cualquier pareja bien avenida. En este último caso, aunque se busque siempre algo especial, el amor puro impera y en el fondo solo queremos estar bien con nuestra pareja sin que los detalles importen tampoco demasiado. Eso no ocurre en las escapadas para amantes. El morbo de lo furtivo y el riesgo de ser descubierto ponen un aliciente importante que exige que el esfuerzo merezca la pena. Por ello este tipo de escapadas son tan especiales y hay que tratarlas de una forma diferente y con mucho tacto, sobre todo cuando nuestra pareja oficial piensa que hemos ido de viaje de negocios a Santander, por ejemplo, y nos encontramos en los brazos de nuestra chica en Córcega.
Aunque la diversidad de gustos es bastante grande vamos a ver algunos detalles que podrán orientarnos si nos encontramos identificado con esta forma de disfrutar de una escapada romántica.
-Si elegimos un destino costero, debemos asegurarnos previamente de que las playas son de arena suave y mar esmeralda.
-El tema gastronómico también es muy importante, no vale cualquier buen restaurante. Para este caso necesitamos tener localizado algún restaurante muy especial.
-El lugar debe ser intimista, sofisticado y que invite al relax.
-Si nuestra escapada la realizamos en verano, a ser posible, nuestro destino debe tener incorporado un area de masaje frente al mar, además de hamacas paraguayas para descansar.
-Por supuesto, la habitación de hotel debe reunir todas las comodidades y atenciones necesarias, además de excelentes vistas, para que nos sintamos totalmente cómodos y tranquilos.
Sin embargo, a veces no hay posibilidad de que la pasión vaya unida al lujo y busquemos algo más modesto aunque con un encanto similar al que tendríamos si pagáramos por una gran suite. Esos casos no son preocupantes, porque en definitiva lo importante son los sentimientos hacia el otro y una buena escapada con nuestro o nuestra amante puede funcionar también con un poco de ingenio y conocimiento de las posibilidades económicas de que disponemos, que para nada deben mermar el resultado final de la experiencia. El modelo Low cost relacionado con los hoteles suele funcionar muy bien. Solo hay que conocer donde encontrar esas joyas de alojamientos con habitaciones de cuento y vistas a los paisajes más sorprendentes para nuestro caso particular. Pues bien, os dejamos algunas muestras por si os sirve para vuestra próxima escapada.
En España
Hotel Casa de Carmona. Sevilla
Hotel Hospedería Valle de Ambroz. Cáceres
En Europa
Hotel Boom!. Bruselas
Vesno Apartments, Budapest
Hotel Castro. Isla de Folégandros. Grecia
Aparthotel Anyospark. Andorra
Hotel Shegara. Porto Vecchio. Córcega
Hotel Le Moulin de Moissac. Mediodía-Pirineos. Francia
